“Impulsar la minería es una posibilidad concreta de desarrollo para las provincias alejadas de la pampa húmeda, para generar empleo, mejor calidad de vida, educación y salud, en el lugar de origen de cada ciudadano y ciudadana, en su provincia, su ciudad o su pueblo”.
Alberto Hensel, secretario de Minería de la Nación
Cada 7 de mayo, fecha en la que se celebra el Día de la Minería en conmemoración a la primera Ley de Fomento Minero en el año 1813, sancionada por la Asamblea Nacional Constituyente, a propuesta de la Junta de Gobierno de aquel entonces, los actores que de alguna manera involucrados en el desarrollo del sector lo viven como una oportunidad para realizar un inventario de los hitos -positivos y negativos- para así poder comprender mejor los desafíos a futuro.
Por su parte, el secretario de Minería de la Nación, Alberto Hensel, tomó la posta y realizó un balance de su gestión, en donde plantea que, a pesar de la pandemia que afectó a la economía global en 2020, se ha podido llevar adelante “una planificación estratégica basada en la co-construcción de una visión compartida de la minería”.
“Impulsar la minería es una posibilidad concreta de desarrollo para las provincias alejadas de la pampa húmeda, para generar empleo, mejor calidad de vida, educación y salud, en el lugar de origen de cada ciudadano y ciudadana, en su provincia, su ciudad o su pueblo. Es una posibilidad para que la Argentina sea más equitativa, más federal, más equilibrada en su matriz productiva”, señaló el secretario.
Para ello, desde la cartera que comanda Hensel bajo la órbita del Ministerio de Desarrollo Productivo, avanzó en la confección del Plan Estratégico para el Desarrollo Minero Argentino que -tal como fue presentado por el funcionario- busca “fijar las reglas del juego para los próximos 30 años”.
Según Hensel, participaron “provincias, instituciones públicas, empresas, sindicatos, académicos, líderes religiosos, organizaciones de la sociedad civil, ambientalistas, instituciones educativas, líderes de opinión, entre otros, en un espacio de diálogo abierto, amplio y plural” con el fin de lograr acuerdos “para el desarrollo sostenible de la industria minera argentina”.
Hacia adelante, el secretario indicó que el programa de comunicación minera es el próximo paso “para cumplir con una asignatura pendiente con la sociedad de manera de brindar con claridad y transparencia la información que todo ciudadano y ciudadana necesita y demanda de esta industria”. “Debemos ser extremadamente comunicativos, veraces y transparentes, nuestra sociedad lo demanda, tanto como demanda los minerales que producimos o incluso un poco más”, aseguró.
A continuación, reproducimos reflexiones del secretario en el Día de la Minería:
- “Es tiempo de humanizar la minería y tiempo de levantar la cabeza, abordar los temas, dar los debates que sean necesarios y poner claridad. El desarrollo de la sociedad está sustentado sobre la base de la producción e industrialización de minerales. Las falacias no se terminan por ignorarlas o restarle entidad a los grupos anti todo y por eso, mientras más comuniquemos mejor”.
- “La minería vive con nosotros y a nuestro alrededor, eso lo sabemos dentro del sector, pero necesitamos que cada argentino y argentina lo sepa también, que cada ciudadano y ciudadana conozca que el mundo que lo y la rodea y mejora su calidad de vida, su salud, su trabajo, que acerca a sus afectos y que nos mantuvo juntos aún en pandemia, sale del suelo de su patria y es trabajo para sí y para sus compatriotas, que es desarrollo para sus industrias y para regiones postergadas de nuestra geografía, generador de miles de pymes argentinas”.
- “La pobreza nos resulta absolutamente inaceptable, sobretodo teniendo recursos naturales suficientes para superarla. Consideramos que un planteo ecológico debe necesariamente convertirse en un planteo social, es decir que se debe escuchar tanto el clamor de la tierra como el clamor de los pobres. Tiene que existir un equilibrio, toda solución ambiental debe incluir ineludiblemente al ser humano y procurar su dignidad”.
- “Nuestro país nos da la potencialidad de poder desarrollarnos en el lugar donde nacimos y de fortalecer nuestras capacidades, pero por diferentes motivos durante muchas décadas se optó por impulsar una sola región geográfica. Vengo de una provincia que un día comprendió que podía ser viable, que tenía recursos para mejorar la vida de su gente y logró cambiar su destino”.
- “Hablemos de minería, todo el tiempo y con todo el mundo. Contemos qué es, cómo se hace y para qué se usa. Creemos que este es el camino y la industria sabe que es tiempo de abrirse a una sociedad ávida de conocer de qué se trata”.
- “Tenemos un compromiso con el país y su gente que merece poder decidir cómo hacer minería y no enredarse en falacias y sofismos, que por inverosímiles que fueran han sido las únicas campanas que han sonado hasta hoy y que tienen la particularidad de no haber podido cumplir ninguno de sus presagios”.